jueves, 22 de diciembre de 2011

Época de felices fiestas?!

Por muy extraño que parezca, en las épocas de celebración surge lo que se denomina pesar del recuerdo, y literalmente así es.  Existen personas que se aferran tanto a los recuerdos que debido a ello no pueden disfrutar las situaciones que se les  presenta en el momento actual y menos aún pueden visualizar los por venires.
En esta época navideña, tenemos la oportunidad de revisar nuestras acciones a lo largo del año (claro, yo recomendaría que esta revisión se hiciera diariamente, siempre a la misma hora...por ejemplo, cuando nos disponemos a dormir, yacemos en nuestra cama y antes de dormirnos, hacer una revisión...!) y darnos la oportunidad de experimentar sentimientos y  tomar consciencia de ellos. Pongámosle nombre a los sentimientos: ¿soledad?, ¿tristeza? ¿añoranza?, cada nombre representa algo diferente! Así podremos darnos cuenta realmente de qué es lo que estamos experimentando; o como decía una de las adultas mayores que en alguna ocasión asesoré "las mariposas del estómago ya tienen nombre!".
Sin más, les deseo que la pasen bien, llenos de amor, paz y que el año nuevo traiga prosperidad en todas las esferas de sus vidas!

miércoles, 7 de diciembre de 2011

Abierta segunda promoción del Posgrado en la U Católica

El próximo 23 de enero del año 2012  daremos inicio a la segunda promoción del Posgrado en Gerontología de la U católica, yo seré nuevamente profesora y espero contribuir a crear más profesionales en gerontología, que nuestro país necesita!!!

martes, 29 de noviembre de 2011

Evaluación anual del Programa Red de Atención Progresiva para el Cuido Integral de las PAM en CR 2011

Hoy 29 de noviembre se ha realizado la primera evaluación anual del Programa de Red de Atención Progresiva para el Cuido Integral de las PAM en CR 2011, la cual contó con asistencia de representantes de las 42 redes que existen en este momento.
Fue excelente la estrategia de poder socializar las experiencias de redes que existían desde antes de que el Programa fuera parte del plan actual de gobierno; así como escuchar a las profesionales en Trabajo Social exponer, aunque de manera muy concisa para mi gusto, su quehacer.  Como profesional en TS pude leer la trascendencia del quehacer de las profesionales, aunque al no haber 42 TS presentes en la actividad, me cuestiono si realmente las organizaciones conocen y valoran nuestro quehacer.  Sí quedó claro que hay 8 modalidades de atención dentro de la Red de Cuido y que algunas se encuentran incipientes, y que a veces la legislación nacional  es "perversa"....

También queda evidencia de la necesidad de que fortalezcamos las formas de brindar ayuda, siendo más integradores de las diversas oportunidades existentes, tales como el Programa Manos a la Obra, del IMAS, donde se pretende que las personas desempleadas brinden servicio voluntario inclusive como cuidadores "temporales" para acompañamiento a citas médicas, o retiro de medicamentos o algunas otras acciones.  Sí hay que considerar que no se incurra en relaciones laborales que vengan a generar cargas sociales y similares.

domingo, 27 de noviembre de 2011

La atención gerontológica centrada en la persona...

Este es el nuevo modelo de intervención gerontológico que nos proponen desde España, pueden descargarlo de la siguiente dirección:
http://www.imsersomayores.csic.es/documentos/documentos/martinez-atencion-01.pdf

martes, 8 de noviembre de 2011

Un pequeño aporte gerontológico!!!

Como todos saben la docencia de la gerontología -esto es "pasar por maestra", como diría mi querido y admirado Dr. Hidalgo [uno de mis maestros de gerontología]-, es una de mis pasiones.  Así, me decidí a publicar un artículo donde recogí los resultados de una investigación que hicieron mis alumnas y acá les comparto la liga, para quienes deseen lo descarguen.

http://ucatolica.ac.cr/index.php/publicaciones/book/51-humanitas-vol8/3-revista-humanitas.html

También les comento que el próximo 16 de noviembre, asistiré a la presentación del volumen 6 de la Revista de Gerontología de la UCR, donde también publiqué otro artículo.  Pronto lo pondré por acá para que pueda servir de apoyo a quienes lo necesiten.

Redes integrales de cuido: el rol vital de Trabajo Social

Como sabrán, en nuestro país tenemos por primera vez una dama, ostentando el cargo de presidir como mandataria, el rumbo de Costa Rica.  Dentro de su plan de gobierno, figura una estrategia excelente: La Red Progresiva (???) de cuido, dirigida a personas adultas mayores que: 1-carezcan de redes sociales, 2-que teniendo redes sociales no sean capaces de satisfacer la calidad de vida del mayor y 3-que se encuentre en pobreza extrema.
Es así como, maximizando recursos humanos y financieros, se priorizan 40 comunidades, pero para definir cuáles son, se usa un criterio de factores múltiples: concentración poblacional etárea, inseguridad ciudadana, capacidad logística, etc.
La citada Red contempla dentro de su seno, ocho subprogramas, aunque en el discurso popular nos hacen creer que son sólo seis.  Y curiosamente, todos están enfocados desde una perspectiva de Economía del Bienestar y desde el Asistecialismo.
El pasado 07 de noviembre, 13 profesionales en Trabajo Social que colaboramos con instituciones para mayores y estamos vinculadas también con las redes de cuido, decidimos compartir experiencias, gestar un equipo de trabajo, solidarias, apoyándonos unas a otras, unificar instrumentos, etc; de manera que podamos incidir con altos índices de calidad a favor de las personas adultas mayores que son beneficiadas por la Red.
De más está comentar que el camino aún es largo por recorrer, como en casi todos los nuevos proceso, pero he ahí la mayor ventaja: "se hace camino al andar", aprendiendo de aciertos, desaciertos -que espero no sean demasiados, está en juego la calidad de vida de las PAM!!!-, y estoy convencida que podremos aportar con nuestro conocimiento...como dijo una colega "podremos ilustrar!".

viernes, 21 de octubre de 2011

Gerontología en El Salvador...


La gerontóloga española  Teresa Martínez colabora con el Gobierno de El Salvador
 
Seleccionada como experta internacional  por el Gobierno  de la República de El Salvador para desarrollar un   intenso  programa  de trabajo para  promover  el  modelo de atención centrado en la persona en el país
Teresa Martínez Rodríguez, psicóloga experta en gerontología social, colabora  en varios  proyectos, apoyados por el IMSERSO, con el Gobierno de la República de  El Salvador para apoyar la mejora asistencial en centros de personas adultas  mayores y la formación de profesionales en gerontología.

PROGRAMA  TRABAJO (lunes 24 al sábado 29 de octubre de 2011)

Proyecto para mejorar la calidad asistencial en hogares/residencias, partiendo del modelo de atención basado en la persona.

Participará, en primer lugar en un proyecto del Gobierno para la mejora de la calidad asistencial de residencias. Para ello, se ha organizado una jornada el próximo lunes  día 24 de octubre dirigida a los profesionales de hogares/residencias de personas mayores en relación al tema calidad asistencial, calidad de vida y atención centrada en la persona.

Además, durante los  días 24, 25 y 26, la experta española formará y pondrá en marcha un grupo de profesionales promotores de mejoras en la red de hogares de El Salvador, para avanzar en el modelo de atención centrado en las personas. Con el fin de que quienes administran y atienden dichos recursos, tengan mejores conocimientos sobre el trato adecuado y el respeto de los derechos de sus usuarios y usuarias.

Docente  del Primer Diplomado en Gerontología Social de El Salvador

En segundo lugar, Teresa Martínez participará los días 27, 28 y 29 en el Diplomado en Gerontología Social, primera acción de formación postgrado especializada en el país, organizado por la Secretaría de Inclusión Social (SIS)  y la Universidad de El Salvador (UES). La gerontóloga española imparte el módulo relacionado con el diseño y puesta en marcha de Políticas Sociales para personas mayores.

Conferencia en la Universidad de El Salvador

Cabe además señalar que  el día 27 de octubre, a las 11 de la mañana, en la Universidad de El Salvador (UES),  imparte una  conferencia, abierta al público, titulada “La intervención gerontológica en contextos rurales”.

Breve reseña de Teresa Martínez:
Centro de trabajo: Consejería de Bienestar Social e Igualdad. Gobierno del Principado de Asturias. España
Trayectoria profesional

ü  Inició su carrera profesional en la atención directa  y trabajó durante 12 años en una residencia y centro de día para personas mayores especializado en Alzheimer de titularidad pública.

ü  Fue Jefa del Área de Planificación y Programación. Dirección General de Atención a Mayores, Discapacitados y Personas Dependientes. Gobierno del Principado de Asturias (España)  2000-2007.

ü  Fue Directora General de Planificación y Calidad. Consejería de Bienestar Social del Principado de Asturias (España) 2007-2008.

ü  Autora de publicaciones y artículos científicos en el campo de la gerontología social  y la discapacidad. Ha impartido múltiples ponencias y presentado numerosas comunicaciones en diferentes foros científicos relacionados con la gerontología y la discapacidad.

ü  Profesora en diferentes cursos de postgrado y masters en gerontología social en diversas universidades españolas y en acciones formativas organizadas por diferentes gobiernos autonómicos de España.

ü  Docente en cursos de postgrado y asesora  en Hispanoamérica, en colaboración con el IMSERSO, Universidad Autónoma de Madrid, la AECID (Agencia Española de Cooperación con Iberoamérica para el Desarrollo) y la CEPAL (Naciones Unidas): México, Guatemala, Chile, Uruguay, Costa Rica, El Salvador y Perú.

ü  Premios: Sociedad de Geriatría y Gerontología del Principado de Asturias 1995; Premio Pañella Casas otorgado por la Sociedad Española de Geriatría y Gerontología (SEGG) en 1995 y 2004. Mención Honorífica del Premio IMSERSO-Sociedad española de geriatría y gerontología 2.002.

ü  Participó en el subcomité AENOR normas UNE para la calidad en la gestión de centros de día y de noche para personas en situación de dependencia.

ü  Participó en la elaboración de contenidos y en el diseño de la metodología de evaluación de las Buenas Prácticas del portal Enclaverural.es (IMSERSO).

ü  Participó como experta en el grupo de trabajo convocado por el IMSERSO para la definición de un nuevo modelo residencial para personas mayores.

ü  Miembro de la Promotora del Comité de Ética de Intervención Social del Principado de Asturias (España).

ü  Miembro del Comité consultivo científico internacional del Grupo Interdisciplinar Iberoamericano de Gerontología (GIIG).

Actualidades en Trabajo Social y Gerontología en CR

Luego de meses de ausencia por estos lares, he de contarles que me encuentro trabajando por servicios para uno de los Hogares para Personas Adultas Mayores más viejos del país. De más está contarles que la experiencia ha sido, sencillamente exquisita, con todo y las frustraciones de no poder hacer más de lo que profesionalmente se puede...
También ha sido interesante conocer que de más de 100 hogares para mayores en nuestro país, de carácter subvencionado por el Estado, sólo 7 cuentan con profesionales en Trabajo Social, con grados de bachiller y licenciatura y sólo yo con formación en Gerontología...El próximo 7 de noviembre tendremos una sesión de trabajo del colectivo de TS y es muy interesante poder socializar las experiencias que todos y todas estamos derivando al respecto de nuestro quehacer.

En otro orden de cosas, hoy nuestro colega Marcos Chinchilla, me ha enviado el siguiente mensaje:

Al dar click en esta liga  usted puede descargar el documento preliminar sobre la Definición de Trabajo Social, mismo que está en proceso de construcción y consulta con la Federación
Internacional de Trabajadores Sociales y la Asociación Internacional de Escuelas de Trabajo Social.
Laura Acotto, representante por América Latina ante la 
Federación Internacional de Trabajadores Sociales, solicita de manera respetuosa las observaciones, sugerencias y comentarios que se tengan sobre el documento. La consulta es extensiva a estudiantes, profesionales y docentes, y se puede realizar de forma individual o colectiva. Las respuestas deben remitirse al correo lalyacotto@yahoo.com.ar

Para quienes mantengan interés en posteriores consultas del documento, el mismo se mantendrá en el sitio web de la Asociación Latinoamericana de Enseñanza en Investigación en Trabajo Social, ALAEITS.

Saludos
Lic. Marcos Chinchilla M.
Secretario ALAEITS



Les invito a visitarle y aportemos con nuestra experiencia!!!


miércoles, 21 de septiembre de 2011

Entrevista realizada a Norberto Alayon...


Norberto Alayón: “Hay que ponerle límites a la lógica capitalista por vía del derecho laboral y de políticas sociales universales que impliquen la redistribución de la riqueza”. Entrevista al reconocido Trabajador Social



 20 de Septiembre, 2011   Iniciativa
Reportaje de Telémaco Subijana y Federico Ghelfi
Iniciativa entrevistó en exclusiva a Norberto Alayón, Trabajador Social, docente universitario y Profesor Titular de la Facultad de Ciencias Sociales (UBA). Fue Vice-Decano de dicha Facultad en el período 1998-2002; y Profesor Titular de la UNNE (Universidad Nacional del Nordeste), de la UNAM (Universidad Nacional de Misiones), y de la UNCPBA (Universidad Nacional del Centro de la Provincia de Buenos Aires). En esta oportunidad reflexiona acerca de aspectos inherentes al ejercicio de su profesión, opina sobre la implementación de la AUH y describe cuáles considera que son los desafíos pendientes en materia social. También analiza el proceso electoral, en el que señala el vacío programático de la oposición política. 

En su libro Asistencia y asistencialismo – ¿pobres controlados o erradicación de la pobreza? usted estudió la diferencia entre ambos términos ¿Nos podría comentar esa distinción?
En rigor, hay una diferencia conceptual sustantiva que hace a la consideración de fondo acerca de los aspectos promocionales que debe tener toda labor de asistencia. En particular, he trabajado la diferencia entre asistencia y asistencialismo desde hace tiempo, planteando y reivindicando la asistencia como un derecho y no como una práctica asistencial desde una perspectiva clientelista. Es decir, se debe tener un enfoque reparador en contra de la dependencia y el patronazgo, que debilitan indudablemente la vigencia de los derechos sociales y la construcción de ciudadanía.
En ese sentido, asistencia y asistencialismo se basan en dos concepciones absolutamente contrapuestas, aunque no se puede dejar de reivindicar la asistencia en épocas de crisis donde no sólo no existe el empleo ni políticas sociales universales, sino que a veces hasta se carece de atención básica. En la propia Ciudad de Buenos Aires, el distrito más rico del país, muchos aspectos de lo social no son debidamente contemplados y la gente queda carente de esos servicios.
De este modo, en el libro formulo, por un lado, una diferencia pero, por otro, se trata de una reivindicación activa en cuanto a que la gente tiene derecho a ser asistida cuando no tiene otras alternativas, ya sea porque no acceden a un empleo, porque el salario es insuficiente o por la ausencia de políticas sociales universales.
¿Cuáles son los principales ejes de trabajo actuales del trabajador social? ¿Cuáles son los desafíos profesionales en este contexto tanto nacional como internacional?
El trabajo social es una profesión intrínsecamente ligada a la defensa de los derechos humanos en su concepción más amplia y más abarcativa, sumado a la perspectiva de contribuir al mejoramiento de las condiciones de vida de la población. En ese sentido, hay dos ejes centrales: uno que no es privativo del trabajo social -y hay que recordarlo permanentemente en nuestro país que ha sufrido dictaduras terribles- que es la contribución a un posicionamiento que tienda a la defensa de la democracia como sistema único de vida política y social. Simultáneamente, y esto es lo central, los trabajadores sociales debemos abocarnos a la preservación y defensa activa de los derechos sociales. Cabe destacar que hay una diferencia significativa entre lo que uno debe entender como una democracia con derechos sociales y una democracia con pobreza e indigencia. Son dos paradigmas y dos encuadres cualitativamente distintos. Indudablemente puede existir (y ocurre en ocasiones como de hecho lo hemos tenido nosotros en la década del 90) un funcionamiento democrático en el país pero con restricción de los derechos sociales. La Argentina de los ´90, cuando primó el neoliberalismo, es un claro ejemplo de lo anterior. En ese sentido, la pobreza se constituye como un factor que debilita y cuestiona la esencia misma de la democracia. Es por este motivo que considero importante reivindicar una democracia con derechos sociales y, de ese modo, pensar al trabajo social como una profesión que contribuye -desde su especificidad- al mejoramiento de las condiciones de vida de la población, especialmente en áreas como la salud, la educación y la vivienda. En rigor, el trabajo social tiene participación muy amplia en los distintos órdenes de la vida, y se debe generar una contribución en el respeto de los derechos humanos, de las diversidades, de los derechos de los pueblos originarios; en suma, un profundo respeto ético a los sectores históricamente más vulnerados, en los que se requiere poner el eje central debido a su postergación histórica. Ese es el lugar donde el trabajo social puede, debe y está en condiciones de generar una contribución importante.
¿Qué asignaturas quedan pendientes en materia social?
Hay cuestiones pendientes de carácter estructural que son significativamente importantes para el futuro del desarrollo político y social de nuestro país, y que, de alcanzarlas, indicarían una transformación cualitativa. Quizás el principal ejemplo tiene que ver con una reforma tributaria e impositiva. Entiendo que es una asignatura pendiente muy difícil de abordar pero es imprescindible para generar y garantizar la posibilidad de orientarnos hacia un desarrollo económico y social más equitativo, particularmente en sus causales más significativas. En caso de no abordarlo, estaremos ante el peligro permanente de perseverar en sociedades no suficientemente igualitarias. En un país como la Argentina, encarar la reforma impositiva es poco menos que hacer la revolución, porque los sectores poderosos de alta concentración económica se resisten fuertemente al tema. A lo sumo aceptan algunas modalidades de desarrollo capitalista con inclusión social, que es un avance interesante que se está dando en estos últimos periodos en el país, pero siempre y cuando no les afecte totalmente su base de acumulación. Entonces, es desde allí donde se debe realizar un aporte realmente importante.
Hay que ahondar y profundizar lo máximo posible las medidas que, complementando la política económica, apunten a luchar contra la pobreza y la indigencia. Debemos decir que se está haciendo mucho y se viene marchando muy bien pero, como el propio gobierno lo reconoce, aún quedan cuestiones para seguir avanzando. Hay que tener en consideración un planteo realista de acuerdo a las condiciones objetivas por las que atraviesa nuestro país. Pero uno aspira, y no dejamos de seguir reivindicándolo, a que por lo menos la pobreza se reduzca, para no quedarnos solo en el planteo de la aspiración absoluta, que sería la eliminación total. De modo que todo lo que apunte a propuestas o programas que impliquen mayor inclusión, mayor transferencia de riqueza a los sectores populares, debe ser plenamente apoyado, y defendido activamente
Desde la implementación de la Asignación Universal por Hijo se debate la disyuntiva entre transformarse en un complemento al sistema de asignaciones familiares o en un ingreso por fuera del salario. ¿Cómo cree que debe implementarse la medida? ¿Estas políticas deben ser pensadas fuera del mercado laboral?
Si hay un elemento que debemos complementar y profundizar es la Asignación Universal por Hijo, porque estamos en condiciones de hacerlo. Debería salir por ley, de modo que se que garantice y transparente absolutamente un derecho tan importante. No relativizo la medida, sino todo lo contrario: la AUH ha sido revolucionaria porque implica una transferencia sustantiva a los sectores más vulnerables. Teniendo en cuenta la persistencia de los niveles de trabajo informal en la Argentina, hay que combatir esa inseguridad porque estos sectores sociales no cuentan con los derechos establecidos por las leyes en relación a los salarios formales. De allí la necesidad de implementar medidas complementarias. Ojalá pudiéramos resolverlo todo por la vía de la formalidad laboral, pero en tanto existan modalidades incompletas en nuestro propio desarrollo que requieren excepcionalidades, a veces alternativas que no son las que desearíamos, pero son las posibles coyunturalmente. Eso hay que evaluarlo con cuidado. Como decía Paulo Freire “para poder mañana hacer lo que hoy es imposible, tenemos que ir haciendo lo que hoy es posible”. En ese sentido, esta frase da cuenta de la necesaria agudeza que hay que tener para interpretar los momentos coyunturales específicos, porque uno podría decir de manera global: “que se erradique definitivamente la pobreza, construyamos un régimen diferente al sistema capitalista”, pero no es tan fácil; la historia marca posibilidades concretas y sobre ellas hay que cabalgar, no sobre aspiraciones en abstracto que muchas veces se transforman en inviables. Esto no tiene que ver con un nivel de claudicación, sino de tener la agudeza suficiente como para interpretar las coyunturas y las limitaciones históricas concretas.
La economía social adquirió un gran dinamismo luego de la crisis del 2001. ¿Qué perspectiva tiene de su desarrollo?
Esto no es un tema sencillo. Por un lado, me parecen muy interesantes las distintas modalidades ligadas a la concepción de la economía social, pero habría que tener en cuenta también que las mismas surgen como una especie de reparación ante dificultades de carácter estructural de cara a las políticas económicas. Si esas alternativas de economía social implican la posibilidad que algunos sectores en la escala micro-local puedan mejorar su condiciones, considero beneficioso que se las apoyen. Pero cabe resaltar que en ocasiones se presentan algunos límites a ese tipo de experiencias por lo que, de alguna manera, tiene que existir la posibilidad de un nivel de competencia en la lógica del mercado. De ese modo, se puede trabajar para que se posibilite el despliegue y la inserción necesaria de esas experiencias. En muchas oportunidades uno puede observar que hay algunos emprendimientos que son fantásticos por el esfuerzo y que producen cierto tipo de productos con una calidad que se le hace difícil competir con otros sectores económicos. En consecuencia, eso puede revelar un gran trabajo que termina siendo frustrado por la dificultad de generar un producto de determinada calidad. Eso, en determinado momento, termina fracasando.
Es necesario generar un proceso de desarrollo económico que permita la obtención de determinados niveles de riqueza, con su consecuente distribución. Esto debe incluir la generación de excedentes porque, de otro modo, se dificulta el sostén estructural de dicho proceso. Por todo, me parece acertado promocionar instancias de economía social a condición de que eso no opere como un debilitamiento de aquellos ámbitos de las políticas económicas centrales, ligadas al empleo formal, a lo que la OIT llama “empleo decente”. Esto es lo que va a generar definitivamente un proceso de reactivación sustentable de la economía.
Ante los avances de determinadas áreas sociales, ¿hacia dónde cree que debe orientarse el trabajo del Estado en relación a la articulación de las diferentes demandas?
En ocasiones aparece una especie de subdivisión de la problemática social que por momentos obstaculiza la comprensión de un origen común en la generación de esos problemas, que está ligado a las características que predominan en nuestros modelos de funcionamiento social. Ahora bien, entender ese origen común generador de problemáticas sociales tampoco nos debe llevar al extremo de no reconocer determinadas especificidades y, en ese sentido, es lógico que haya particularidades si se trata de políticas más ligadas, por ejemplo, a la tercera edad o a la primera infancia. Es decir que hay particularidades que van requiriendo de una atención especializada. Esto no está mal siempre que se tenga en cuenta que no implique una especie de delegación y segmentación que impida la comprensión del origen de esos problemas. La problemática social en la cual se ve inmersa buena parte de la población suele tener un origen central ligado fundamentalmente a la ausencia de políticas generales (que habiliten alternativas de inclusión social) o a la ausencia de políticas de empleo. Cuando determinados sectores de la sociedad carecen de un empleo, de seguridad social, las consecuencias serán una cantidad de problemas irradiados en particularidades. Esa familia va a tener problemas de salud, de educación, de vivienda. Llegada a una instancia de marginalidad, esto puede arrojar una mayor vulnerabilidad con peores consecuencias. Pero no debemos olvidar que estos problemas son derivados de un origen inicial común que después se desagrega en problemáticas aparentemente particularizadas. Por este motivo, todas estas medidas tienen que tener siempre el recordatorio y la comprensión de la importancia del componente de la prevención. No hay nada más preventivo para los problemas sociales que un buen trabajo y un buen salario, y eso después tiene que estar acompañado de políticas que habiliten la educación, la salud, etc. Si nosotros podemos simplemente garantizar mejor empleo y mejor salario tenemos una parte significativa de la resolución y de la auto-resolución de los problemas por parte de la propia gente.
En relación al proceso electoral nacional, ¿considera que están en juego dos modelos sociales diferentes?
La oposición, que ha tenido un resultado poco favorable en las últimas elecciones, no siempre da cuenta de una propuesta siquiera consistente. Algunas incluso son definitivamente reaccionarias y conservadoras, mientras que otras pueden estar señalando algunos límites al funcionamiento actual. Ahora bien, además de que estas propuestas no tienen posibilidades ciertas, no me da la impresión de que puedan estar en condiciones de mejorar la alternativa actual en manos del gobierno nacional.
Como primera y más antigua verdad, hay que recordar que funcionamos dentro de un sistema capitalista y, en ese sentido, hay una limitación y una contradicción que es muy difícil de superar. Este sistema está basado en la búsqueda del lucro y la ganancia y es intrínsecamente generador de pobreza y constructor de sociedades desiguales. Todo esto, por la vía de una apropiación diferenciada de la riqueza producida por todos. Por esto, aquí nos encontramos frente a una discusión compleja. Nuestros países adolecen de una doble dificultad: padecemos la vigencia del sistema capitalista, y simultáneamente, la ausencia de desarrollo capitalista. Los niveles de atraso que registran nuestros países son notorios en relación al uso de la energía, a los medios de comunicación, a las carreteras, a la incorporación e inclusión de muchas comunidades del interior del país, etc. Entonces, existe esta doble vertiente en donde por un lado hay que poner un límite al sistema capitalista por la vía del derecho laboral y de la implementación de políticas sociales para que el mismo no sea tan voraz e inequitativo; y, por otro lado, hay que generar un mayor despliegue de desarrollo de manera que mejoren algunas condiciones de atraso, de las cuales nuestros países tienen que desprenderse. Ante contextos en los que coexiste un funcionamiento cuasi feudal en algunos ámbitos de nuestro país, dicha situación es todavía peor que el propio desarrollo capitalista.
En este sentido, se deben marcar ciertas posiciones disparatadas y políticamente inviables, de las que todo el mundo puede estar presto a decir. En este contexto, no me parece que haya ninguna alternativa a las propuestas que lleva adelante el gobierno nacional. Hay que tener en cuenta el período histórico y el funcionamiento del mundo, pero sin que esto implique renunciar a aquellas aspiraciones posibles de concretar en los próximos años. También debemos reconocer que hay que profundizar los rumbos, mejorar e incentivar significativamente aquellas políticas que favorezcan a la mayoría de la población y, a la par, estar profundamente atentos a que hay que generar modalidades de relativización de la lógica capitalista. Todo esto para ponerle límites, por vía del derecho laboral y de políticas sociales universales que implican la redistribución de la riqueza. Hay que dar batalla para continuar avanzando en la dignificación de los salarios, y generar un proceso de mejor distribución funcional del ingreso. Argentina tuvo una época semejante, cuando había un 50-50% entre capital y trabajo. Si bien se ha mejorado mucho, todavía tenemos ese desafío pendiente. Hay que pelearlo permanentemente; tanto el capital como el trabajo son los dos factores esenciales de la generación de la riqueza pero tiene que haber primero una re-distribución equitativa. No puede ser que la riqueza vaya exageradamente a manos del capital en desmedro del esfuerzo que han hecho los trabajadores.
Ud. hacía mención previamente de las realidades compartidas entre los países de la región. En este sentido, ¿qué nos puede decir respecto al cambio de enfoque -ahora centrado en las políticas universales- de los diferentes gobiernos latinoamericanos?
En los diferentes países de América Latina se está verificando una corriente muy importante -a ser defendida- que se correlaciona con un posicionamiento más activo en pos de la defensa de los intereses continentales y de la unidad latinoamericana. En este sentido, considero que la tendencia hacia la implementación de políticas de carácter universal es absolutamente superadora de aquellas que se planteaban en la época del neoliberalismo. No solo por el carácter focalizado de esas medidas sino también por la miserabilidad de los recursos. Esta última cuestión no puede dejar de ser tenida en cuenta y en ningún momento deber ser subalternizada por cualquier otro aspecto de carácter conceptual. Dicho de otro modo: si se formula una política de carácter universal y los recursos y montos son reducidos, la insignificancia de esos montos cuestiona, relativiza y frustra la pertinencia conceptual de una política universal. A la cuestión conceptual de una política de carácter universal tiene que estar ligada profundamente la magnitud de los recursos. Por todo ello, lo que se tiene que transferir son aquellos recursos suficientes que permitan dignificar la vida de la gente. Considero un avance auspicioso y sumamente relevante la generación de políticas sociales universales en los distintos países de Latinoamérica.

Si desean contactarle: nalayon@sociales.uba.ar

sábado, 27 de agosto de 2011

Situación de la Oferta Nacional en materia de atención gerontológica para las familias costarricenses

Los invito a leer mi artículo científico Situación de la Oferta Nacional en materia de atención gerontológica para las familias costarricenses, lo pueden ubicar en la Revista Humanitas de la U Católica, número 8 del mes de junio 2011.

domingo, 21 de agosto de 2011

Congreso Latinoamericano de Gerontología Comunitaria


Me ha llegado esta invitación a mi mail y me parece pertinente le conozcamos:

Hola quería invitarlos al Congreso Latinoamericano de Gerontología Comunitaria, que se realizará entre el 17 y 19 de noviembre en la Ciudad de Bs. As.



Para mayor información e inscripción, ver en: http://congresodegerontologiacomunitaria.seadpsi.com.ar

sábado, 6 de agosto de 2011

Primeras exposiciones de Portafolios en el Posgrado de Gerontología

Hoy las estudiantes de la primera promoción del posgrado en Gerontologia Psicosocial iniciaron la exposición de Portafolios, la cual estuvo excelente. Cada vez me convenzo más de que esta herramienta es genial!







Páginas web de Hogares para Ancianos en Costa Rica

En el fb de Gerontología Costa Rica, http://www.facebook.com/pages/Gerontologia-Costa-Rica/108502789189080#        los amigos de Hogar Albernia, situada en San Isidro de Heredia, nos comparten la liga a su web:  www.hogaralbernia.com
Queda todos cordialmente invitados a visitarle!!

lunes, 25 de julio de 2011

Institucionalización del anciano y cuidadores familiares


Autores: DIEGUEZ, Alberto J. y de los Reyes Ma. Cristina.
Título: Institucionalización del anciano y cuidadores familiares.
País: Argentina.
Año: 1999.
Descriptores: Vejez – Institucionalización – Cuidadores familiares – Vulnerabilidad –


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XIV Congreso Argentino de Logoterapia

Hacia un envejecimiento con sentido

Mar del Plata, 1 al 2 de Octubre de 1999


Modalidad de Trabajo : Ponencia
Autores: Dr. Alberto José Diéguez y Lic. María Cristina de los Reyes
Actividad profesional: Docencia e investigación
Sede académica: Facultad de Psicología de la Universidad Nacional de Mar del Plata. Argentina.



INSTITUCIONALIZACION DEL ANCIANO Y CUIDADORES FAMILIARES


Objetivos

El presente trabajo se propone realizar una aproximación al análisis de la vulnerabilidad de ancianos y cuidadores familiares principales y las responsabilidades compartidas en la institucionalización de ancianos. La ponencia es un avance de resultados del Proyecto que desarrolla el Grupo Psicología Social para la Prevención en Salud de la Facultad de Psicología de la Universidad Nacional de Mar del Plata Imagen de la internación geriátrica y satisfacción con los servicios brindados entre familiares de residentes”

Metodología

Los datos principales fueron recogidos a través de veinte entrevistas en profundidad, siguiendo los lineamientos del muestreo teórico, realizadas a cuidadores familiares principales de ancianos residentes en geriátricos privados con una antigüedad no menor a seis meses en los mismos. Se contrastaron estos datos con análisis de informantes calificados y la bibliografía proveniente del campo de la gerontología y las ciencias sociales. Las observaciones y entrevistas, los análisis presentes en la bibliografía y las críticas a la misma, son presentadas como diversidad de interpretaciones que confluyen o divergen, según las perspectivas adoptadas, sin pretensiones de generalizar ni excluir la existencia de otras posibles interpretaciones.

Introducción

Asistimos a un acelerado y progresivo proceso de envejecimiento poblacional en nuestro país, con una proporción de personas mayores de 60 años del 13% del total de habitantes en 1991, a diferencia del 7% que representaba este conjunto poblacional en 1950. En la ciudad de Mar del Plata un 16% de la población es mayor de sesenta años, constituyendo un factor explicativo del aumento de la población añosa la migración constante hacia nuestra ciudad de jubilados. Estos últimos comparten con el conjunto de migrantes expectativas de bienestar y ocio recreativo promovidas por un imaginario que ha influído fuertemente en la elección del lugar de residencia. Los avances científicos y tecnológicos han permitido el alargamiento de la vida, y en muchos casos, el disfrute de las personas ancianas de la última etapa de sus vidas. Pero así como la vejez no es un fenómeno homogéneo, la calidad de vida de los ancianos y su bienestar varía como resultado de esa diversidad.

            La vulnerabilidad de los ancianos residentes en geriátricos y sus familias constituye una fuerte motivación para la investigación del problema, en el que intervienen una multiplicidad de factores y procesos a los que intentaremos un acercamiento desde la perspectiva psicosocial.
El desarrollo de políticas sociales que contemplan los problemas del envejecimiento en los países desarrollados es muy notorio en relación a nuestro país, donde impera la incertidumbre y el desamparo, a pesar de los esfuerzos de organismos no gubernamentales, profesionales y personas relacionadas con la atención de la ancianidad. En este contexto se observa el crecimiento de la institucionalización de ancianos, fenómeno complejo y multideterminado. Según registros de febrero de 1999 del Area Tercera Edad de la Subsecretaría del Menor, la Familia, Discapacitados y la Tercera Edad de la Municipalidad de General Pueyrredón, existen en Mar del Plata cincuenta y tres establecimientos geriátricos y cuarenta y ocho pequeños hogares, funcionando estos últimos en casas de familia para un máximo de cuatro ancianos autoválidos. Con una oferta estimada de 2600 plazas entre los dos tipos de establecimientos, la proporción de internación geriátrica sobre la población mayor de 60 años es de un 2,7 %, (Pássera G. y otros, 1998) mientras que en el país este porcentaje se calcula en un 1,5%, considerándose bajo en comparación con otros países.
Nuestra motivación no se deriva de la importancia numérica de los ancianos internados ni de la trascendencia mediática que adquieren algunos establecimientos por situaciones de maltrato físico a los ancianos, sino que está originada en la convicción de la necesidad de aportar a la transformación de la conflictiva que los actores directos de la institución geriátrica viven cotidianamente en y con dicha institución, mediante la participación efectiva de esos actores en la misma, el desarrollo de una conciencia crítica y la solidaridad.
Es a partir del reconocimiento de la situación de vulnerabilidad en la que se encuentran familiares y ancianos (física, económica, psicológica y social) que ponemos el acento en los factores relacionales que afectan a los integrantes del hogar geriátrico como sistema, y por lo tanto, como subsistema en relación con otros sistemas que lo incluyen.
Diversos factores contribuyen al crecimiento de la internación geriátrica en nuestro país (Matusevich,1998; Oddone,1998; Valderrama, 1998), con sus particularidades en la ciudad de Mar del Plata, entre los que se destacan:
a)      El incremento de la población añosa y la necesidad de cuidados especiales en la franja de edad que supera los setenta y cinco años de edad, por la mayor incidencia de demencias y diferentes problemas derivados del deterioro físico y cognitivo. En una investigación realizada en 1998 en la ciudad entre 18 hogares geriátricos, un 68% de los residentes eran dependientes en diversos grados, y de ellos, un 81% padecían deterioros cognitivos o demencias b) Los cambios producidos en la familia, especialmente por la ampliación de roles que desempeña la mujer fuera del hogar, c) Los problemas habitacionales, por la reducción espacial e inadecuación de las viviendas y d) La inexistencia de alternativas a la internación geriátrica, en forma de apoyo domiciliario por voluntarios o cuidadores profesionales, información y formación de la familia, grupos de apoyo para familiares y disponibilidad de centros de día. A excepción de un hogar municipal que dispone de veintiocho plazas, destinado a la atención diurna de ancianos indigentes, no existe en la ciudad otro emprendimiento de este tipo en el ámbito público o privado.


Responsabilidades compartidas en la institucionalización de ancianos

La búsqueda de contactos para la realización de las entrevistas en que se basa esta ponencia - diecisiete de las cuales fueron tomadas a mujeres -, lo informado por personas calificadas en el tema y la bibliografía revisada coinciden en el predominio de las mujeres en el cuidado de familiares enfermos. El protagonismo femenino en el seno de la familia que afronta el problema de cuidar a un anciano, derivado de relaciones de género en las que se encuentra naturalizada la responsabilidad de las mujeres por el cuidado de la salud de la familia, hacen comprensible la presencia del sentimiento de culpa que predomina en el proceso de decisión previa a la internación (Stefani, 1992)
La ausencia o debilidad del apoyo percibido de la red familiar y social (amigos, vecinos, compañeros de trabajo) ocurre en un contexto de progresiva individualización en nuestra sociedad. El culto a la juventud y la belleza física, a la salud y el estar bien, el culto al éxito, la perfección, las tecnologías de punta y el consumo sin límites alienta otros cultos: el de la desvalorización, la negación de existencia y el odio al otro como afirmación de la propia identidad. El prejuicio y la discriminación hacia los diferentes y grupos minoritarios o subordinados de la sociedad, como las mujeres, los niños, los adolescentes, los viejos, las minorías sexuales, las personas que conviven con el virus del SIDA y las de escaso poder económico, entre otros afectados por el fenómeno de diferenciación-exclusión, está convirtiendo a nuestra sociedad en un mundo hostil, al que aprehendemos con perplejidad, asombrados hasta de nuestros propios pensamientos.
Teniendo en cuenta los factores estructurales que intervienen en el crecimiento de la internación de larga estadía, proponemos considerar cuidadores indirectos a los servicios sociales estatales encargados de la atención sanitaria, a los organismos de gobierno con poder legislativo y de control de instituciones relacionadas con la tercera edad, y a las organizaciones no gubernamentales como expresión organizativa de la comunidad para la atención de sus integrantes más necesitados. El entrelazamiento de niveles y responsabilidades en la institucionalización de ancianos se hace evidente en las interpretaciones que de la situación realizan algunos familiares, a las que se debiera  prestar particular atención, ya que existe una tendencia a la responsabilización excluyente de las familias en dicha situación.
Cinco entrevistadas experimentaron al mismo tiempo sentimientos de culpa y desamparo en la etapa de toma de decisión de la internación, señalando la falta de apoyo estatal dos de ellas, como lo demuestra el siguiente relato:
“...A mí se me parte el alma, porque lógicamente, acá hay que incluir otro elemento, no se puede no cumplir, es lo mal que vos te sentís por haber tenido que tomar esa medida, esa decisión que genera mucha culpa, te sentís re-mal...Es muy complicado, además contar lo que uno vivió, el malestar, el sufrimiento de uno mismo al tomar esa decisión tan cruenta, es cruenta porque no hay además desde el Estado, o querés ver qué hacer cuando la persona llega a un grado de deterioro, donde para la familia es terrible tener que afrontarlo...” (M., 56 a., hija de una residente con secuelas de accidente cerebro- vascular)

            María Teresa Bazo, socióloga y docente de la Universidad del País Vasco, ha expresado en relación al tema:
“La hipótesis del abandono de los deberes familiares es tan simplista como falsa es la idea de que la solidaridad familiar se basa únicamente en la existencia de la necesidad. Se entiende que la familia y sus miembros, así como el Estado y sus representantes, son actores en interdependencia. Tal interacción se ha complejizado con el tiempo, y ambas partes tienen que intentar conducir la situación de la mejor manera posible, siendo cambiante la forma de entender esa manera “mejor” de actuar” (Bazo, 1992)

El sentimiento de desamparo asociado a la inexistencia de alternativas a la internación geriátrica en la ciudad fue manifestada por tres entrevistadas, una de las cuales nos decía:
“Yo estuve desesperada un año y medio. Yo quería un hogar de día, pensaba: “mientras yo trabajo, mamá está ahí, después la voy a buscar”...Ahí empezó mi información sobre que en ese momento no había un solo lugar de día de internación en todo Mar del Plata....A mí me pesó en mi conciencia sobre que no había una propuesta de lugares de día. Que era: depósitos, o si no, la cosa intermedia a los viejos no le estaba permitida...” (G., 58 a., hija de una residente con demencia senil)

En cuanto a las responsabilidades de la autoridad estatal en la elaboración y aplicación de un marco jurídico adecuado,  la normativa legal que rige la actividad indica insuficiencia en las normas relativas al funcionamiento de los geriátricos, así como contradicciones entre normas provinciales y municipales con aplicación en la misma ciudad (Decreto Provincial 3280/90 y Ordenanza Municipal 4751/81).  El contralor municipal de la actividad está centrado en el proceso de habilitación, ya que no existe un sistema de evaluación permanente de la actividad. Los familiares entrevistados manifiestan desconocer la normativa legal, y aún entre los que han cambiado de establecimiento al anciano por deficiencias en la atención, no se recurrió al municipio ni realizado demandas legales a los establecimientos.


Vulnerabilidad de ancianos y familiares


La red de apoyo más importante para el anciano está constituída de hecho por la familia. Las ventajas de la familia en su rol de cuidadora de ancianos han sido señaladas por tener generalmente como objetivos mayor seguridad emocional, menor número de incomodidades y mayor intimidad, evitando al mismo tiempo los problemas psicopatológicos de la institucionalización: despersonalización, abandono, negligencias, confusión mental, medicalización exagerada, falta de afectos, etc. Las desventajas de la atención por parte del cuidador familiar estarían relacionadas con el desconocimiento de una tarea que requiere especialización, la falta de un equipo de apoyo, los conflictos familiares que derivan en la sobrecarga del cuidador principal, la inadecuación de las viviendas para este tipo de cuidados y los problemas económicos.
El cuidado de los familiares viejos enfermos produce en los cuidadores problemas de diversa índole: influye en el desarrollo normal de sus actividades laborales, produce privaciones en el cónyugue e hijos y restringe su vida social, generando agotamiento físico, stress y angustia. Los problemas del cuidador familiar representan al mismo tiempo un riesgo para el anciano. La especial vulnerabilidad de los cuidadores y los trastornos psicosomáticos están relacionados con la escasez de ayuda recibida y la clara percepción de la inexistencia de tales ayudas (Florez Lozano y otros, 1997). En nuestra investigación, los familiares entrevistados relataron diferentes situaciones que los condujeron a la inevitabilidad de la internación por la imposibilidad de brindar una atención adecuada a sus familiares ancianos. La mayoría de ellos prestó cuidados en forma personal y en el hogar a el anciano enfermo, y sólo cuando la situación los desbordó decidieron la internación. Dieciocho de los veinte entrevistados informaron sobre el deterioro mental de los ancianos, situación que es analizada en la bibliografía como determinante en el momento de decidir el pasaje al geriátrico, por el sufrimiento que representa para la familia (Matusevich, 1998; Florez Lozano, 1997). Los relatos siguientes ejemplifican esta situación:
Desde el 85 se le diagnosticó mal de Alzheimer. Toda la familia creyó  que éramos un Alzheimer, todos destruidos, todos con psicoterapia, todo un desastre total; nos empezamos un poco a recuperar, pero cuesta...Realmente parecía espantoso tener que sacar a mi madre de la casa y tener que internarla, pero también entendimos, a pesar de todo, mis dos hermanas y yo tomamos la decisión de la internación...(I., 42 a., fem.)

“Hizo un ACV hemorrágico y bueno con todo un compromiso neurológico,... con un disfagia, y tuvo una serie de problemas que hacía que ya dependiera de pañales, no tenía posibilidades de tragar,... entonces bueno, eso nos llevo a tomar la decisión, y por que sí era una necesidad, evidentemente tenía que estar con un cuidado las 24hs del día, con alguien que la acompañara, yo tenía que trabajar, cuando uno trabaja es muy difícil mantener a alguien así bien...(E., 25 a., fem.)

Las experiencias previas a la internación geriátrica de estos cuidadores pueden ser factores explicativos del distanciamiento de las instituciones de larga estadía cuando el anciano ha ingresado a una de ellas, que se expresará en pocas visitas en algunos casos y una visión conformista en otros. Muchos aspectos mejoran en la percepción inicial que tiene el familiar acerca de la atención del anciano, pero especialmente el familiar necesita reiniciar su vida normal, y pasarán meses, en algunos casos años, antes de conocer y actuar en relación a un mejoramiento de la atención a su familiar.
Y bueno... no había ningún tipo de estimulación de nada, no había atención profesional. Se la internó ahí  porque se pensaba que era lo mejor, siempre buscando lo mejor  para nuestra vieja, ... y lo que menos me  gustó, que fue cuando empecé a abrir los ojos, era el consumo de medicamentos que tenían, y bueno descubrí que había sobredosis; me llevó bastante tiempo, me tuve que acomodar, necesité apoyo terapéutico para afrontar la situación, por que no es fácil  y cuando lo descubro, hablo con toda mi familia y todos me dicen ok., pero ocupate vos, por que es así... Bueno, y yo sigo andando.(E., 25 a.,fem.)

            La entrevistada expresa en sus dichos la importancia del transcurso de un cierto tiempo en relación a detectar fallas en la atención, así como la escasez de apoyo familiar en situaciones conflictivas. Problemas en la atención hacia los ancianos  y ausencia en diversos grados de apoyo familiar y social se encuentran estrechamente relacionados en el análisis de diversos autores (de los Reyes, 1998; Rossjanski, 1989; Salvarezza L., 1998).


Conclusión

Los factores referidos al contexto de la institucionalización de larga estadía señalan responsabilidades compartidas en los problemas que se derivan de la misma por diversos actores sociales, ampliando el enfoque centrado en los cuidadores familiares y el ámbito del geriátrico hacia la red social más amplia.
Lo expuesto destaca la vulnerabilidad de los ancianos con necesidad de cuidados especiales y de sus familiares, especialmente de las mujeres que desempeñan el rol de cuidadoras. Dicha vulnerabilidad se extenderá a la situación de internación en un establecimiento geriátrico, en la que el familiar que se hacía cargo antes del ingreso del anciano seguirá siendo el principal responsable de sus cuidados, que implicarán menor compromiso de horarios y tareas, pero aumentarán la complejidad de la situación por el sentimiento de culpa experimentado y la asimetría en las relaciones con la institución.
            Factores históricos, económicos, políticos y culturales se entrelazan, expresándose en las relaciones de la familia, el anciano y el geriátrico en una conflictiva que sólo puede resolverse individualmente en el contexto actual. Las respuestas a una deficiente calidad de la atención, a la rigidez institucional y la ausencia de políticas estatales de protección a la vejez institucionalizada parecen ser de dos tipos en los primeros resultados de nuestra investigación: el distanciamiento progresivo de la institución o negación de los problemas que en ella suceden, y el traslado del anciano a otro geriátrico. En este último caso, las experiencias han sido por lo general negativas.
Centrarnos en el análisis de discursos y prácticas de los familiares de residentes no implica reducir dicho análisis. Estos familiares forman parte y dan cuenta por lo tanto de la compleja trama de la sociedad que interviene directa o indirectamente, por acción u omisión, en la construcción de una realidad que nos atraviesa aunque intentemos negarla.

Bibliografía
Bazo M. T. (1992): Nueva sociología de la vejez. Cap. 1 en La ancianidad del futuro. Fundación Caja de Madrid. 1997. Barcelona, SG  Editores S.A.

de los Reyes M. C. (1998): Geriátricos y maltrato en la vejez, Trabajo Libre Jornadas Municipales acerca del Maltrato en la Tercera Edad, Mar del Plata.

de los Reyes M. C. (1999): Imagen y prácticas de la  internación geriátrica. Mimeo.

Florez Lozano J.A., Adeba Cándenas J., García García M.C. y Gómez Martín M.P (1997).: Psicopatología de los cuidadores habituales de ancianos. Revista Departamento de Medicina. Universidad de Oviedo, Barcelona, http://www.doymanet.es

Fornós Esteve M. (1998): Experiencia de trabajo grupal en una institución geriátrica. Biblioteca de textos Campo Grupal,  http://www.geocities/SoHo/Museum/9653

Matusevich D. (1998): Envejecimiento e institucionalización geriátrica, en Envejecimiento y vejez. Nuevos aportes, Ferrero Gloria A. (comp.), Buenos Aires, Ed. Atuel.

Oddone M.J. (1998): El Tercer Sector y la Tercera Edad, en Conjuntos: Sociedad Civil en Argentina. Consejo Asesor de la Sociedad Civil. Banco Interamericano de Desarrollo en Argentina. Buenos Aires, Edilab Editora.

Pássera J., Junqueras V., Casella E., Cabero L., Quintupuray C., Zamora A. y González Manzur R.(1998): Evaluar ancianos o las instituciones que los albergan?. Ponencia al VIII Congreso Argentino de la Sociedad Argentina de Gerontología y Geriatría. Noviembre 1998, Buenos Aires.

Rossjanski S. D. (1989): La familia del anciano institucionalizado. Rev. Argentina de Gerontología y Geriatría, Tomo 9, Nº 1, Ene-marzo, pág. 34-39.

Salvarezza L.(1998): La capacitación en gerontología, Cap. 6 en Salvarezza L. (comp.):  La vejez.Una mirada gerontológica actual. Buenos Aires, Ed. Paidós, 1998.

Stefani D. (1992):Gerontología psicosocial: estudio de la acción de internar a un anciano en un geriátrico en sujetos de diferente sexo. Revista Argentina de Gerontología y Geriatría. Tomo 12, Nº3, Julio – setiembre.

Valderrama H. (1998): La institución geriátrica como centro de servicios gerontológicos. Conferencia Primer Congreso sobre organizaciones geriátricas, organizado por la Federación de Geriátricos de la República Argentina. http://www.fegera.com

miércoles, 20 de julio de 2011

Algunas fotos del Conversatorio de Ejercicio Liberal

Durante la apertura de Bienvenida del Conversatorio

El presidente de nuestro Colegio: Dr. Jorge Sáenz, quien brindó palabras de bienvenida y exhortó a las y los colegas a continuar vinculados en escenarios no tradicionales como el Liberal


Se trabajó en subgrupos, donde una miembra de la Comisión de Ejercicio Liberal tuvo la responsabilidad de coordinar el grupo, en la foto la MSc. Ramos es la de blusa rosada.